Porque nadie est? seguro... Luis Armengol despierta en una pensi?n de mala reputaci?n con el cad?ver de una joven desconocida a su lado. Sus manos ensangrentadas y el cuchillo con el que la chica fue apu?alada en el suelo lo se?alan como culpable , al mismo tiempo que la Polic?a llama a su puerta. En un acto desesperado consigue escapar, pero conservar? su libertad por poco tiempo a menos que encuentre las pruebas de su inocencia. ?Qui?n le ha puesto...