Alguna vez nos hemos de proponer descubrir la naturaleza del conocimiento para se alarnos una nueva manera de pensar y a n de vivir. No cabe duda que todo verdadero conocimiento siempre nace al amparo de una actitud espiritual. Alguien ha dicho, con justa raz n que la verdad solo se revela a los ojos del amante. Es decir que se requiere la nobleza de la simpat a, el poder de la voluntad para descubrir lo que hay de oculto en la naturaleza, en el universo...