Muchos de los lectores del Semanario pintoresco Espa ol, en cuya obra peri dica han visto la luz p blica estos art culos, me manifestaron el deseo de tenerlos reunidos en un peque o volumen, donde poder leerlos seguidamente y sin el embarazo y confusi n de materias propias de un peri dico. He debido, pues, ceder a tan ben vola invitaci n, y a la de mi amigo el Sr. D. Miguel de Burgos que ha querido ocupar sus prensas con esta obrilla; pero no puedo...