Hay un ej rcito de pastores invisibles que llevan la pesada carga y los sinsabores del ministerio. Ellos callan, lloran, son tentados, se enferman... como todo el mundo. Muchos tiran la toalla y se dan por vencidos. C mo mantener una vida de equilibrio con tantos papeles que desempe ar a la vez: pastor, esposo, padre, hijo, proveedor, empleado y consejero? Dios est buscando siervos transparentes, que mantengan los pies en la tierra,...