Tres multimillonarios me hacen una oferta que no puedo rechazar. Qui n iba a decir que me encontrar a en un juego de alto riesgo sin reglas claras.
Siempre he hecho lo necesario para salir adelante. Por eso, cuando me ofrecen una cantidad rid cula de dinero por un trabajo aparentemente sencillo, acepto encantada. Al principio, son solo negocios.
El amor nunca form parte de la ecuaci n... o eso cre a yo. Sin embargo, a medida que...