La afirmaci n de Santo Tom s de Aquino acerca de que el alma, separada del cuerpo, no es persona entra en conflicto con lo mantenido por A. G lvez, en su obra Comentarios al Cantar de los Cantares, sobre la necesidad metaf sica de la presencia de entes personales para la relaci n de amor. Si, tal y como la Teolog a Cat lica ense a, las almas de los justos despu s de la muerte participan de esa relaci n de amor con Dios, o bien la afirmaci n tomista...