William Charpentier era un hombre importante, nada menos que el primer ministro de Francia. Qui n lo conociese, dir a que es un hombre respetable, sagaz y honorable. Y, cuando de pronto se ve casado de una forma muy poco convencional y con una mujer sumamente t mida, William piensa que todos sus problemas se han resuelto de forma conveniente. Lo que jam s espero, fue que aquella tierna mujer, guardara un secreto tan grande, uno que amenazaba con llevarlos...