Mi vida se ve alterada cuando un buen d a Patricia, la esposa de un amigo, acude a m pidiendo mi ayuda y me cuenta que quiere divorciarse porque Miguel la ha pegado. Viendo las marcas de la paliza en su cara, me cre su versi n pero al ir a recriminar a su marido su comportamiento, est me confirm que era cierto pero que si le hab a puesto la mano encima hab a sido por ser infiel. No sabiendo a qu atenerme, la pongo bajo mi protecci n sin tener...