Esa ma ana comenz como tantas otras que fueron y que ser n, el despertador marc las 05:00 AM, mientras un rayo de sol impertinente se asom por un hueco que ten a la cortina de su ventana. Jennifer sinti el calor sobre su rostro y sumado al concierto que daba el reloj, tuvo una sensaci n de agrado por contactarse con el astro rey. El desaf o de comenzar un nuevo d a y la tragedia que supone despertarse, a n m s dejando atr s una actividad tan reconfortante...