Cuando Chavannes Carpenter se imagin a una colegiala, la imagen no encajaba. Lleva faldas largas que parecen bastante ra das. Sus abultados jerseys ocultan sus curvas y siempre lleva el pelo recogido en un mo o desordenado. Sus zapatillas de tenis est n desordenadas y desgastadas, y sus gruesas mallas tienen rayas. Sus gafas de montura oscura ocultan parte de su cara... pero no toda. Porque vislumbr esos ojos azules como el hielo y le atravesaron...