Dirigi ndose a los l deres religiosos de Sus d as, Jes s dijo, "porque cerr is el reino de los cielos delante de los hombres; pues ni entr is vosotros, ni dej is entrar a los que est n entrando." l tambi n nos ense a pedirle a nuestro Padre, "... Venga tu reino. H gase tu voluntad, como en el cielo, as en la tierra... Porque tuyo es el reino y el poder y la gloria por siempre." Poco dispuestos a seguir el pobre ejemplo de esos escribas y fariseos,...