En 1926 Alfonso Hern ndez Cat public El ngel de Sodoma. Es considerada la primera gran novela gay de la literatura cubana. Su protagonista descubre sus inclinaciones er ticas en medio de su cerrado ambiente familiar y se debate entre las consecuencias de su condici n personal y lo inevitable.
El discurso central de El ngel de Sodoma refleja los conflictos internos y sociales de Jos Mar a, personaje principal de la novela. Durante un proceso de autorreconocimiento de su condici n homosexual, esta no constituye el nico tema presente en la obra de Hern ndez Cat .
La trama de esta novela no puede comprenderse separada de las realidades socioculturales de la Cuba de la poca.
No, no se hab a fijado en la mujer... Ni siquiera sab a si era rubia o morena. Sus cinco sentidos sumados al de la vista, no hab anle bastado para mirar, con todo anhelo, con todas las potencias sensuales dormidas hasta entonces, sin que su raz n se diera cuenta, a otra parte. Desde que las dos cris lidas dejaron en el suelo la envoltura, un instinto imperativo, adue ndosele de la mirada, borr por completo la estatua femenina, las fieras, hasta la multitud. Fue un largo y hondo minuto, turbio, lleno de removidas heces de instinto, en el cual su raz n, su moral, su pudor, sus timideces, su dignidad misma, sintieron estallar debajo de ellos una erupci n repentina e irresistible. Y ahora, en medio de la calle, dando traspi s que, por fortuna, Jaime atribuy a su falta de costumbre de beber, confes se sin medir a n todo el alcance terrible del descubrimiento, que solo el eco del tacto de una de las tres diestras estrechadas persist a en la suya, y que solo una figura perduraba en su retina y en sus nervios: la del hombre... La del hombre joven y fornido nada m s