Fuentes (1929) completa su vasta obra narrativa con una galer a de mujeres cuya virginidad, m s que atributo divino, es la prueba que el escritor se impuso Para penetrar en sutiles misterios del alma y del cuerpo humanos. Es una profunda indagaci n del mundo, demonio y carne...
De un modo o de otro, el lector siempre es virgen. La vida siempre puede dividirse en un antes y un despu?s. El antes y el despu?s de la virginidad, en qu? circunstancias marcan vidas, producen muertes, salvan almas? Presentes y pret?ritos, carnales y et