Tras el xito de la revoluci n de 1820, Aviraneta, que, se encontraba exiliado en M jico, vuelve a Espa a. A los pocos meses, es nombrado regidor de Aranda de Duero, donde trata de poner en pr ctica los principios del liberalismo. Desde el primer momento, se enfrenta con el clero y los elementos absolutistas locales, que boicotean sus medidas modernizadoras y que adem s, cuentan con el apoyo armado de guerrilleros como el cura Merino. Aviraneta crea...