Los cient ficos aseguran que la tierra se puede medir, estimar la cantidad de agua que hay en los oc anos y, calcular la distancia que existe entre la tierra, la luna y el sol, sin embargo el amor de Dios nadie lo puede medir, porque este va mas all del razonamiento humano, y es obvio que la nica v a para tener una idea de su excelso amor, es aceptar el regalo sublime que nos dio, es decir: a su nico hijo Jes s, quien ofreci su vida, para morir...